Este es un artículo que he estado posponiendo por mucho tiempo, y aunque el tema es apasionante, también es muy complejo y controversial y los argumentos presentados por los especialistas, ya sea a favor o en contra, en su mayoría están lejos del entendimiento del común de las personas.
Las evidencias acerca de que estamos viviendo un cambio climático son muchas y en ese sentido toda la comunidad científica está en consenso. En donde no hay consenso es en el causante o forzante de dicho cambio.
Algunos consideran que estos cambios son de tipo antropogénico, lo que quiere decir, que nosotros mismos a partir de nuestras emisiones de gases de efecto invernadero estamos forzando el cambio climático. La otra posición de los científicos es que este cambio se debe a la variabilidad natural del clima y el causante de dichas variaciones es el Sol.
En la historia de 4.500 millones de años de la Tierra se ha registrado una larga sucesión de cambios climáticos, y si citamos la historia más reciente podemos encontrar una mini-edad de hielo alrededor del siglo XVII; un Periodo Cálido Medieval entre el siglo XI y XIV (con temperaturas mucho más cálidas que las que se registran hoy en día); y aún antes, en el Holoceno, encontramos el periodo más cálido de los últimos 10,000 años.
El año pasado tuve la oportunidad de participar del II Simposio Internacional de Climatología y de la III Conferencia Regional sobre Cambios Globales de América del Sur, organizados por la Sociedad Brasileña de Meteorología (SBMET). En todos los trabajos presentados en donde se evaluaron las variaciones del clima observadas en la actualidad se encontraban evidencias significativas de que estos cambios se deben a la variabilidad natural, dejando sólo una mínima probabilidad de que se deban a un origen antropogénico. Esto contradice lo que en muchos medios de comunicación se propala -incluyendo el cine- donde el cambio climático antropogénico se presenta como principal factor de este cambio y es tomado como una verdad absoluta por la población a pesar de que no lo es en la comunidad científica.
Sea por una u otra razón, la única certeza que tengo es que estos cambios existen, nos afectan y nos afectaran aún más en los próximos años, y lamentablemente nuestro país no esta preparado para afrontarlos. Tenemos que minimizar nuestras vulnerabilidades e implementar estrategias de adaptación. Cualquier cosa que se haga para disminuir la pobreza ayudará a reducir la vulnerabilidad al cambio climático, para hacerlo necesitamos desarrollarnos rápidamente y para desarrollarnos necesitamos explotar nuestros recursos naturales.
Los países desarrollados no deberían pedir a los países pobres como el nuestro que retrasen su desarrollo, participando en el esfuerzo de minimizar las emisiones de gases de efecto invernadero y nosotros no deberíamos pretender ser más papistas que el Papa. Los países pobres representamos una parte tan pequeña de la actividad mundial que así redujéramos drásticamente nuestras emisiones de carbono, no disminuiría el supuesto efecto en el clima.
jueves, 22 de mayo de 2008
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